03 de enero de 2013 |
La Unión Europea investiga de nuevo la financiación de los clubes españoles
La Unión Europea ha puesto la lupa de nuevo en las ayudas públicas que reciben los clubes españoles. Bruselas también quiso comprobar en abril de 2012 si el plan del Gobierno para permitir a los clubes de la Liga española solventar su multimillonaria deuda con Hacienda suponía una ayuda de Estado encubierta.
Alexander Italianer, director general de la Competencia, asegura haber recibido «denuncias de varios estados miembros» sobre «medidas adoptadas por los municipios en favor del equipo de fútbol local», y otras referidas a «nivel nacional a la aplicación de un tratamiento fiscal especial a algunas sociedades del fútbol profesional», según se recoge en un documento que remitió en octubre a la representación permanente de España en la UE y que desde allí se distribuyó a las comunidades autónomas. Todo llega, además, en pleno debate en Málaga sobre la posibilidad de que el club se haga con la propiedad del estadio.
Italianer exige a España que se le «facilite una visión de conjunto del sistema de financiación de sus clubes, indicando, en particular, los posibles regímenes únicos en materia fiscal». Además, reclama saber «las condiciones en las que las autoridades locales» ponen los estadios a «disposición de los equipos profesionales».
Por su parte, Joaquín Almunia, comisario de la Competencia, ha decidido estrechar el cerco sobre la financiación del fútbol español, un asunto controvertido en Europa.
El presidente del Bayern de Múnich, Uli Hoeness, se quejó en su día de la comprensión de la que, a su juicio, disfrutan los clubes españoles para eludir sus obligaciones tributarias. «Es el colmo, impensable. Pagamos cientos de millones de euros para que salgan de la mierda y luego los equipos no pagan sus deudas. Esto no puede ser así», denunció.
Las sociedades anónimas españolas deben a la Hacienda pública más de 700 millones de euros (la deuda de los clubes europeos se eleva a unos 7.000 millones).
La UE recuerda que el fútbol es «una actividad económica» y que las ayudas estatales «pueden falsear la competencia». De hecho, solo admite una posibilidad de que el dinero público vaya a las categorías «juveniles y a las escuelas de fútbol», siempre, advierte, que «se disocien de la actividad profesional».
Apoyo al 'Fair play financiero'
La posibilidad de que el dinero público acuda en auxilio de entidades privadas en dificultades financieras queda también descartada por la UE. De hecho, el propio Almunia compareció recientemente en público para dar su respaldo público al reglamento 'Fair play financiero' elaborado por la UEFA.
Según su gran impulsor, el presidente de la UEFA, Michel Platini, marcará un antes y un después. En el curso 2014-2015 se expulsará de las competiciones europeas a los sociedades que gasten más de lo que ingresan.
Explotación de los estadios
La UEFA ha sacado a la luz el dato de que solo el 17% de los clubes europeos son propietarios de los campos en los que juegan. Llegado a este punto, la UE recuerda que su explotación por parte de los clubes es una actividad económica y por tanto queda «sometida al control de ayudas estatales».
Aquí se detiene en un punto muy controvertido. ¿Cuánto deben pagar las entidades en concepto de alquiler de infraestructuras construidas con dinero público?
La UE reclama «precios de mercado». En España, la mayor parte de los clubes usufructuarios de los estadios municipales se limitan a hacer frente a los gastos de mantenimiento. El director general de la Competencia advierte que «muchas de las denuncias presentadas» se refieren «a las condiciones de uso de los estadios municipales y al precio de los terrenos objeto de transacciones inmobiliarias entre el ayuntamiento y el club».
La UE lanza una reprimenda a las instituciones locales cuando sentencia que «parece que no todos los ayuntamientos son conscientes de que las normas sobre ayudas estatales también son aplicables a sus medidas financieras en favor del club de fútbol profesional de la localidad».
La Unión Europea reitera que el dinero público no acudirá al rescate de los clubes de fútbol.
En algunos casos, como aconteció con el ayuntamiento de Vigo al ceder el estadio de Balaídos al Celta, se ha utilizado la figura de la «subvención de carácter no monetario», al no exigírsele al club cesionario el pago de «contraprestación alguna».
|
Modificado el ( 04 de enero de 2013 )
|