14 de noviembre de 2010 |
VENEZUELA La violencia empañó la décimotercera jornada Por Alfredo Torres Quiroz. La decimotercera jornada de del Torneo Apertura del fútbol venezolano, que se disputó el domingo 15 de noviembre, fue empañada por episodios de violencia que arrojaron la escandalosa cifra de ocho heridos: seis aficionados, dos policías, además de cuatro detenciones confirmadas. Habría que agregar que en segunda división dos jugadores fueron heridos por hinchas radicales. Estos incidentes deberían dar lugar a la aplicación de sanciones deportivas y penales, algo que poco ocurre.
Ese contexto de impunidad favorece a los violentos que están convirtiendo los estadios y sus alrededores en lugares inseguros para los aficionados, vulnerando su derecho al deporte y a la recreación en condiciones de no-violencia.
Sería exagerado que el fútbol venezolano está afectado por una suerte de guerra civil de baja intensidad, pero si el problema no se aborda con medidas sensatas pronto llegaremos a esa situación. La sub-cultura de los barra-bravas argentinos está haciendo estragos en las aficiones locales. La versión tropical del modelo importado desde el sur está propiciando el surgimiento de sectores radicales que convierten la agresión física en un recurso habitual para manifestar sus rivalidades deportivas, todo esto en el contexto de una sociedad venezolana donde la violencia es cotidiana.
LEER REPORTAJE COMPLETO
VER REPORTAJE ANTERIOR ESTUDIANTES – TACHIRA - 17.10.10)
|
Modificado el ( 01 de diciembre de 2010 )
|