En un afán desmedido por reafirmar su autoridad, el presidente de la UEFA no sólo se adentra en terrenos resbaladizos, sino que hace esa ostentación en la mismÃsima Casa Blanca, delante del club más grande del mundo, esto es un dato objetivo.
Y cayendo ya en el mal gusto, Platini se atreve incluso a decir que "los vinos españoles son buenÃsimos, tanto como los franceses [no podÃa dejar de mentarlos], pero los de la comida no me hacen cambiar de opinión y se lo he dicho a Florentino". "La cantidad pagada", reiteró, "me parece indecente". 94 millones es una cantidad increÃble".
Por vueltas y vueltas que le damos al asunto seguimos preguntándonos: ¿cual es el tÃtulo que habilita a una asociación privada internacional a extender las limitadas potestades que ya posee sobre sus miembros, al control de su modo de explotación económica?
Claro que más allá de las razones, Platini hablaba desde la rabia interior. Miren si no esta declaración que se le escapó en la misma rueda de prensa: "Nada puedo decir si el club que paga tiene el dinero para fichar pero lo que me incomoda es que yo al final de mi contrato valÃa cero, asà que no entiendo cómo un jugador puede valer tantos millones"
En fin, nos rermitimos al comentario publicado en esta misma web sobre cómo pretender ponerle puertas al campo.
