16 de junio de 2013 |
La FIFA descarta cambiar la sede de los mundiales 2018-2022

Mohamed ben Hammam
En
un comunicado, la FIFA desmiente lo pulicado en diversos medios, en especial el Sport Bild, sobre las supuestas consecuencias de las investigaciones
abiertas por presunta corrupción en torno al proceso de elección de los
mundiales de 2018 y 2022.
La FIFA sostiene que las circunstancias no han cambiado y que la comisión de ética comunicó en su momento, de manera oficial, que el único acuerdo tomado es el de proceder a analizar las denuncias aparecidas en diversos medios.
En 2011, según el citado rotativo germano, el presidente de la federación alemana de fútbol (DFB), Theo Zwanziger, anunció que pediría una investigación judicial sobre el proceso de atribución a Qatar del Mundial de fútbol 2022 a causa de las sospechas de corrupción, y la revisión del proceso de atribución del Mundial-2022 a Qatar.
En enero de 2013, la revista francesa France Football informaba de que Qatar compró la organización del Mundial de 2022 y de que está implicado, entre otros, el presidente de la AFA, Julio Grondona. La publicación, que dedicó a la investigación 20 páginas bajo el título de "Qatargate", aludía además a la posible influencia del presidente del Barcelona, Sandro Rosell.
Según el medio parisino, Qatar dedicó enormes cantidades de dinero para comprar los votos necesarios en el seno del Comité Ejecutivo de la FIFA para lograr la organización del Mundial, que consiguió el 2 de diciembre de 2010 con 14 votos, frente a los 8 de Estados Unidos.
France Football repasó algunos de los elementos que considera que son sospechosos de influir en el voto de algunos de los miembros de la FIFA, muchos de ellos basados en la investigación encargada por la propia FIFA a la Comisión de Ética presidida por el estadounidense Michael García. "Entre presunciones de corrupción, compromisos, contradicciones, posibles cambios de las condiciones y una repentina lluvia de gasodólares, muchas preguntas se plantean sobre la transparencia del voto sorpresa de diciembre de 2010", indica la revista.
En el centro del entramado, la publicación sitúa al ex presidente de la Comisión Asiática de Fútbol Mohamed ben Hammam (foto), apartado posteriormente del fútbol por sospechas de corrupción.
En cuanto a Leoz, que la publicación califica de "omnipotente presidente" de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL), recibió al emir qatarí Hamad bin Khalifa al Thani, presidente de la Federación de su país, para firmar "acuerdos bilaterales" justo después de la atribución del Mundial de 2022.
El Mundial-2018, también bajo sospecha y al que Inglaterra era candidata, fue atribuido a Rusia.
En su comunicado del pasado día 6 la FIFA expresaba lo siguiente:
"La FIFA quiere dejar claro que en su próximo congreso, que se celebrará el mes de mayo en Mauricio, no se llevará a cabo votación alguna para elegir otro país organizador de la Copa Mundial de la FIFA 2022™.
Desde la última toma de posición al respecto de la Comisión de Ética de la FIFA, las circunstancias no han cambiado. Tras su última sesión, esta comisión comunicó de manera oficial en su declaración sobre este asunto que se disponía a analizar las denuncias aparecidas en diversos medios y que la FIFA le hizo llegar, según las cuales se habrían producido irregularidades en el proceso de candidatura a los mundiales de 2018 y 2022, en especial, las posibles pruebas que pudieran dar credibilidad a las acusaciones de conducta improcedente por parte de personas concretas.
Por tanto, todas aquellas afirmaciones que aparecen actualmente en los medios carecen de fundamento alguno".
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Modificado el ( 17 de junio de 2013 )
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