DEPORTES

El debate se extiende al uso de aparatos técnicos para determinar si los balones traspasan las rayas de gol

AGENCIAS, Cardiff
La Internacional Board, el organismo dependiente de la FIFA que regula las reglas de juego del fútbol, decidirá hoy si acepta probar durante un tiempo, a título experimental, que los partidos sean dirigidos por dos árbitros. La propuesta parte de la UEFA y se llevará a cabo en la Segunda División noruega y en otras dos divisiones de otros dos países europeos. También se debatirá hoy la utilización de aparatos eléctricos para determinar con exactitud si el balón entra dentro de la portería. Otra propuesta será la de amonestar a todo aquel jugador que simule una lesión.

La FIFA ha sido receptiva a la propuesta de la UEFA y que ésta planteó después de que lo pidiera su Comisión de Árbitros como una cuestión que facilitaría su trabajo. La FIFA ha dado traslado del asunto a la Internacional Board, organismo al que compete su aprobación o desestimación. La FIFA pretende que se apruebe este experimento arbitral durante la temporada 1999-2000.

La UEFA aprovechó una concentración de árbitros europeos de élite en Portugal la pasada semana para plantearles este asunto. Las conclusiones principales fueron expuestas días después por un portavoz de la UEFA. Este portavoz manifestó: "37 de nuestros mejores colegiados de diferentes países europeos fueron encuestados sobre la posibilidad de introducir dos colegiados en los partidos durante una reunión celebrada en tirras portuguesas. La mayoría de los árbitros se mostró favorable al experimento. Sin embargo, 35 de los 37 colegiados creen que el sistema no funcionará, pero mostraron su predisposición para llevarlo a cabo".

Los árbitros españoles

Entre los árbitros españoles también existe alguna reticencia a este experimento cuyo máximo defensor ha pasado a ser el fútbol noruego. Noruega es, por ese motivo. uno de los países pionero en llevar a cabo las pruebas pertinentes. Los colegiados españoles, pese a sus reticencias, no se oponen a todo aquel ensayo que facilite su trabajo. Algunos de los árbitros españoles indicaron que la presencia de dos colegiados en un partido es posible que represente una complicación más a la que ahora se enfrentan los colegiados a la hora de tomar decisiones.

La propuesta de utilizar dos árbitros data nada menos que de 1935, fecha en la que se realizó algún experimento en Inglaterra. Por entonces, se produjo una propuesta para introducir esta novedad en la Liga inglesa, pero fue rechazada, y hasta el momento cualquier sugerencia en la misma dirección ha sido orillada.

Las discusiones sobre asunto, pese a todo, no han faltado y principalmente cada vez que se ha pensado en recurrir a los avances técnicos para facilitar la solución de los problemas con que se encuentran los colegiados.

En los últimos tiempos se ha intensificado el interés por resucitar el proyecto con el espíritu de hacer una prueba en serio. Por ello se ha elegido ya la Liga de Segunda División noruega y dos campeonatos más de otros tantos países europeos todavía sin determinar, aunque existe la posibilidad de que se ponga en práctica en alguna Liga de Primera División. La prueba se mantendrá durante una temporada al completo.

El reparto de tareas entre los dos colegiados -el capítulo que más complicaciones puede presentar- queda claramente determinado. Cada uno de los árbitros será responsable de una mitad del campo y se ubicará en la parte opuesta a la del juez de línea. Ninguno de ambos colegiados podrá sancionar faltas que se produzcan en el área de actuación del otro compañero.

La International Board también tiene previsto debatir hoy posibles modificaciones de los reglamentos. Afectarían principalmente a la regla 12, que contempla las faltas y conductas antideportivas. El texto que se quiere incluir en este apartado es el siguiente: "Toda acción simulada en cualquier lugar del terreno de juego que trate de engañar al árbitro será considerada conducta antideportiva, y el culpable, sancionado."

Tecnología contra 'goles fantasma'

J.J.P, Madrid
Los goles fantasma , denominación que suele darse a los tantos que entran en la portería pero sólo pueden comprobarse por medios ténicos, siempre han suscitado un fuerte debate. En los últimos años cada vez se han escuchado más voces pidiendo la ayuda de la tecnología para decidir si el balón traspasa o no la raya de gol.

A los árbitros de élite europeos se les preguntó en Portugal si serían partidarios de aceptar cierto tipo de ayuda tecnológica para tomar ciertas decisiones. En particular se trata de utilizar unos sensores o unas cámaras en los bordes de la portería que sirvan para determinar con exactitud si el balón rebasa la línea de gol. "En esta cuestión, todos eran favorables a esta innovación", añadió el portavoz de la UEFA.

En España, la Liga Profesional también se ha planteado este asunto y ha iniciado los estudios para aportar soluciones. Una de ellas sería jugar con un balón con un imán incorporado que emitiese un pitido al traspasar una zona metálica como la que representan los postes de la portería.

La historia del fútbol ofrece un amplio apartado de goles fantasma, algunos de ellos decisivos en competiciones como la Copa del Mundo. El más famoso de todos es el protagonizado por el delantero Geoff Hurst en la final de l Mundial de 1966 frente a Alemania. El partido, que había acabado con empate a dos, necesitó una prórroga. En un ataque del equipo inglés, Hurst lanzó un duro remate que golpeó la parte inferior del larguero, botó con violencia junto a la raya de gol y salió despedido hacia el campo.

Ante la indignación de los jugadores alemanes, el juez de línea ruso Bakramov dijo al árbitro suizo Dienst que el balón había rebasado completamente la línea de la portería. Dienst concedió el gol, el tercero de los ingleses, en una decisión que todavía invita a interminables polémicas, aunque en los últimos años se han conseguido imágenes que demuestran que la pelota no entró en la portería. Inglaterra ganó el partido por cuatro goles a dos.

En el Mundial de 1986, en la primera fase del torneo, Michel batió al portero brasileño con un tiro espectáculos desde fuera del área. El balón se estrelló en la parte inferior del travesaño y luego se introdujo en la portería, pero el efecto lo devolvió al campo de juego. El árbitro no concedió el tanto, aunque la televisión mostró que la pelota había rebasado por completo la línea de gol. Recientemente Raúl y Djukic también protagonizaron goles fantasmas en partidos del Madrid y el Valencia frente al Villarreal. En los dos casos, los remates entraron en la portería, pero los tantos no fueron concedidos.