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FRANCESC BRACERO
Barcelona
Cambio de estrategia. La junta directiva del Barcelona ha decidido pasar al contraataque.
Las continuas denuncias públicas del Elefant Blau serán revisadas por los tribunales de
justicia. Los abogados del Barça preparan una demanda por intromisión ilegítima en el
honor de los directivos y por presuntas injurias. La denuncia, que será presentada en los
próximos días ante un juzgado de primera instancia, es la primera de varias acciones
legales que los letrados del club azulgrana estudian contra el grupo opositor a Josep
Lluís Núñez y que se ejecutarán en las próximas semanas.
La primera demanda se basará en declaraciones de varios miembros del Elefant Blau
relativas a cuatro aspectos concretos: el censo de socios del club, los importes de
fichajes y traspasos, las deudas de la entidad y la legalidad del plazo de 14 días de
recogida de firmas para promover una moción de censura.
La demanda del Barcelona irá dirigida contra varios miembros del Elefant Blau y contra la
misma entidad. El Barça dice: '¡Basta ya!'. No se puede emplear la mentira y la
injuria como arma, comentaron ayer a La Vanguardia fuentes jurídicas
del club para justificar la presentación de la demanda.
El proceso puede dar al traste con la intención del grupo opositor de elaborar una
tercera auditoría de las cuentas del club de la temporada pasada. Para obligar a la junta
directiva a que les permita acceder a los libros de contabilidad, los miembros del Elefant
Blau han comenzado una campaña de recogida de firmas. Según los estatutos del club y la
normativa de la Generalitat, se precisan alrededor de 5.000 rúbricas para lograr la nueva
auditoría.
El Elefant Blau tiene poco tiempo para lograr su objetivo, porque en junio próximo la
junta directiva presentará las cuentas de la actual temporada, con dos nuevas
auditorías. En ese momento, tendrá poco sentido conocer el estado de los números del
club de un año atrás, porque no reflejaría la situación real de la economía
azulgrana. Los expertos consultados por el Elefant Blau apuntan que si se aplicaran
criterios contables distintos a algunos de los utilizados en las dos auditorías de la
temporada pasada se podría determinar la existencia de una cantidad de 15.000 millones de
pesetas en el capítulo de deudas.
Los auditores con los que trabaja el Barcelona aplicaron el año pasado otros criterios.
La principal discrepancia es la forma de consignar las cantidades que el club cobra de
Nike y de los derechos de televisión en pago por visión. El Elefant Blau incluye esos
importes en el capítulo de deudas, porque los considera cantidades adelantadas por
servicios que todavía no han sido prestados. En el Barça se argumenta que las cifras
percibidas son las estipuladas por contrato y no corresponden a adelantos. La directiva
sostiene que no ha utilizado ningún crédito.
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