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El 'Elefante Azul' pretende auditar las cuentas del F.C.
Barcelona con el fin de derribar a Nuñez
Alex Santos/EFE Los integrantes del grupo opositor 'Elefante Azul', contrario a la gestión de la actual directiva del FC Barcelona, están dispuestos a poner en marcha la maquinaria que, "sujeta a la doctrina democrática", como así aseguran sus integrantes, intentará derribar al presidente barcelonista, José Luis Núñez, y a sus colaboradores en la entidad. El eje a partir del cual va a girar todo el proceso es el del ámbito económico, pues el grupo opositor cree haber encontrado la llave que permitirá en un futuro no muy lejano abrir la dirección de la entidad a otras personas. Uno de los pasos emprendidos por el grupo opositor va encaminado a auditar las cuentas del club, actuación para la cual se necesita el apoyo explícito del cinco por ciento de los socios del club, según recoge el artículo 59 de los estatutos del Barcelona, aunque el punto está desarrollado en el artículo 52 del decreto 145/91 de la Generalitat de Cataluña. La estrategia de "El Elefante Azul" se ideó hace unos años con la intención única de acabar con la presidencia de José Luis Núñez, que es el mandatario del Barcelona desde mediados de 1978 y que desde entonces sólo ha debido concurrir a las urnas en dos ocasiones, además de la primera, en su elección, en las que obtuvo una victoria holgada ante Angel Fernández (en julio de 1997; 24.025 votos, contra 5.209) y otra más ajustada ante Sixte Cambra, actual directivo (abril de 1989; 25.441 votos, contra 17.609). Muchos de los integrantes del actual grupo crítico estuvieron enrolados en las diversas candidaturas nacidas en las últimas elecciones, tanto en la que articuló Angel Fernández, Josep Oriola así como la propuesta por Jaume Llauradó. Las tres, al final, se unieron en una, capitaneada por Fernández, mientras que los líderes de ellas han quedado ahora en un plano testimonial. Para llevar a cabo una oposición legitimada, "El Elefante Azul" recogió el testigo de las elecciones que perdió en 1997 y propuso una línea de actuación basada en incrementar el control del gobierno en el Barcelona. Pero para alcanzar todo ello, antes debían llevar al Barcelona a las urnas y plantear una moción de censura, a partir de la cual captar el mayor apoyo del asociado. En la moción, el grupo opositor captó el aval de 14.358 socios (por 24.863 Núñez), una cifra que sorprendió en la directiva y que sirvió al "Elefante Azul" para tomar una posición nada despreciable en la órbita barcelonista. Recobrar vitalidad Todo apuntaba a que con la nueva derrota en las urnas la oposición a Núñez acabaría aniquilada, pero los hechos han confirmado todo lo contrario, pues el 'Elefante Azul' ha cobrado una vitalidad que empieza a preocupar en la directiva barcelonista, especialmente por dos motivos. El primero de ellos es básicamente a consecuencia de la labor de desgaste que está causando la oposición del propio "Elefante Azul", que constantemente está poniendo contra las cuerdas la acción de gobierno del colectivo que dirige Núñez, el cual se siente vigilado. El segundo motivo de preocupación es que la directiva barcelonista entiende que es la primera vez que la oposición llegará a unas elecciones en plenas condiciones, después de haber llevado a cabo una intensa campaña durante cinco años (que es el periodo del mandato), tiempo que se ha planteado el "Elefante Azul" para confeccionar un programa de gobierno que sea capaz de desbancar al nuñismo. No obstante, las perspectivas tampoco son tan desalentadoras para el equipo de José Luis Núñez, ya que a la sombra de "El Elefante Azul", y fruto del trabajo de este colectivo, otros parecen dispuestos a aprovecharse del trabajo de la actual oposición, la cual no es partidaria a admitir ninguna tendencia que no comulgue con sus ideas. A partir de aquí, pues, podría abrirse una carrera para tomar posiciones en la lucha por la presidencia, un factor que favorecería claramente a Núñez.
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